La Ruta del Vino de la Mancha tiene un reclamo para el visitante difícil de superar ya que nos están invitando a descubrir la zona vinícola más grande del mundo, inagotables hectáreas y hectáreas de viñedos que llenan sus campos.

Este océano de viñas comenzó con el cultivo de la vid en la Reconquista cristiana que fue buenamente impulsada cuando a partir del siglo XIII se libraban de pagar impuestos los que plantaran vides, de ahí la gran cantidad de variedades de uvas tanto tintas como blancas.

Toda la historia de la Mancha se ve reflejada en la singularidad de sus vinos con un sabor y calidad excepcionales provenietes de unos suelos calizos con un clima continental de veranos cálidos e inviernos fríos expuestos cerca de tresmil horas de sol al año.

Visitando la Mancha podemos disfrutar de sus vinos tintos, blancos, rosados y espumosos tanto en las 13 bodegas listadas en su ruta como en los restaurantes, bares de vinos o tiendas y espacios de degustación donde una gastronomía tradicional nos hará vibrar con platos como las gachas manchegas, el gazpacho manchego, el pisto, las migas de pastor o el atascaburras a base de patatas, bacalao y huevos, típico de la temporada de invierno.

Pero aquí no acaba todo porque no podemos dejar de degustar el morteruelo, las sopas castellanas o el famosos plato duelos y quebrantos que aparece en el libro Don Quijote de la Mancha.

En un punto aparte contemplaremos el queso manchego que ha conquistado el mundo entero.

Para que el viajero pueda disfrutar de la historia y la tradición, la Ruta del Vino de la Mancha ofrece hospedajes en hoteles y alojamientos con encanto, donde reponer fuerzas para descubrir todas las sorpresas y atractivos de sus rincones escondidos.

Destacaremos los Molinos de Viento de Campo de Criptana, las Cuevas de Tomelloso, la Casa Museo de Dulcinea en El Toboso, la casa de la Encomienda en Socuéllanos y el Complejo Palacial Gran Prior junto con los Museos de Hidalgo y de la Alfarería en Alcazar de San Juan.

Si la naturaleza es lo nuestro podremos encontrar algunos espacios con una belleza incalculable como la Laguna Salicor, los Bombos o el Complejo Lagunar.

Dentro de las actividades o planes que tiene preparadas para los winelovers encontramos en el mes de Septiempre la Fiesta de la Vendimia y el Patio del Vino en Socuellanos, ya en Marzo se celebra en Alcazar de San Andrés el Concurso Regional de Vinos de la Tierra del Quijote con un jurado de 1.000 personas que valoran 250 vinos de unas 80 bodegas de todas las denominaciones de Castilla la Mancha.

En la Ruta del Vino de la Mancha, abril se reparte para celebrar la Romería en Tomelloso y la Feria de los Sabores de la Tierra del Quijote en Alcazar que más adelante en noviembre rematarán una vez más uniendo Cervantes y el Vino en sus Jornadas de vino y bautismo Quervantino.